martes, 9 de noviembre de 2021

El terroir y sus sabores. Mendoza, tierra del buen vino

 ¡Hola gente linda! Ha pasado algún tiempo desde que pasábamos por acá, pero ¡No nos olvidamos de ustedes! Hace algunas lunas atrás dije que iba a escribir una entrada sobre Mendoza y, como lo prometido es deuda… ¡Aquí estamos, en la tierra del sol y el buen vino! Pero… ¿Les cuento un secreto? Entre tantos andares y paseos, no visité ninguna bodega aún, ¡Ops! Pero, ¡Vamos! Que Mendoza es mucho más que buenos vinos y junto a Sabores de Viaje vamos a contarles un poco sobre ello. Preparados, listos… ¡ya! 


¿Por dónde empezar? ¿Qué es lo que más llama la atención al llegar a Mendoza? Seguramente cada uno tenga una opinión diferente, pero en mi caso fue una cosa: el verde. Es extraño pensarlo cuando uno viene de Misiones, quizá una de las provincias con más vegetación del país. Pero lo que asombra aquí es la mano del hombre: oasis artificiales creados a través de canales de irrigación en un lugar que naturalmente debería ser desértico. Esto logra un contraste impresionante de viajar a través de paisajes áridos y llegar a ciudades donde los arboles abundan, el césped y los parques. 

Y en eso no miento, Mendoza debe de ser una de las provincias con los parques más bonitos de Argentina. Los mismos, al igual que el más icónico, el Parque General San Martín, nos muestran el pensamiento cultural que se vivió durante la Generación del 80’s, donde la tradición francesa dejó su impronta. Así aparecieron numerosos cafés, las famosas medialunas, edificios ornamentados y bellísimos parques. 


Charles Thays fue el paisajista de origen francés quien se encargó del diseño del famoso parque de la ciudad: el ya mencionado Parque San Martín (Además de muchos otros del país, como el Parque Sarmiento en Córdoba, el 9 de Julio en Tucumán o nuestro querido Parque Iguazú). Donde se destacan los famosos portones traídos de Europa, la Fuente de los Continentes o los Caballlitos de Marli; eso sumando al enorme predio natural, una perfecta opción para disfrutar en tranquilidad o acompañados de unas deliciosas tortitas mendocinas. 


Y aquí nos encontramos con nuestro primer sabor característico de la provincia, consumidas por un enorme porcentaje de la población; por lo que decir que se venden como pan caliente es, tal vez, bastante apropiado. Las tortitas consisten en una masa de alto contenido graso similares a pancitos y las vienen en tres tipos: raspaditas, pinchadas y de hojaldre. A veces decir que “menos es más” realmente es acertado ya que, pese a su sencillez, una vez que las pruebes no vas a dejar de comerlas. Vos, ¿Te animás a probarlas? ¡Más abajo dejamos la receta! 


Pero eso no es todo, en tema de sabores Mendoza se caracteriza por ser de lo más diversa. Existen cafés y restaurantes de todos los tamaños y para todos los gustos. Por lo que la hora de la merienda cobra protagonismo con múltiples opciones a elegir: la pastelería más elegante, diferentes variedades de cafés, té en hebras o alternativas para los más golosos traídas de diferentes partes del mundo ¿Por qué no unos waffles, o unas donas? ¿Y si mejor un helado? Y es que las heladerías no se quedan atrás, y las hay de todos los tipos y para todos los bolsillos. Entre las más tradicionales se encuentran las heladerías de la familia Soppelsa, que desde 1920 sirven helados de tradición italiana. Con el tiempo, la heladería ha perdurado en la ciudad, y fueron los hijos de este heladero italiano, Ferrucio Soppelsa, quienes se han hecho cargo de ella, siguiendo su camino a través de sus propios emprendimientos: Soppelsa helados, Soppelsa Hermanos y Dante Soppelsa. 



Y aquí no podemos dejar de recomendar a la última, ubicada en calle Lavalle de la ciudad de Mendoza. Para aquellos que busquen algo más que helado, una experiencia única: y es que aquí encontrarán nada más y nada menos que un cucurucho convertido en una obra de arte. 



Como buena provincia argentina, el protagonista siempre es la carne. Sin embargo, los italianos también han dejado su impronta en algo más que helados, lo que se ve plasmado en numerosos locales de pastas y pizzas. La zona sur de la provincia se caracteriza por su producción vacuna, encontrándose la Fiesta Nacional del Ternero en General Alvear. Pero para los “gastroturistas” ansiosos de experiencias nuevas, Malargüe aparece como la mejor productora de chivitos. Dicen algunos que los mejores del país ¿Será verdad? Y es que no por nada se posiciona como Capital Nacional del Chivo y el secreto está en la alimentación de los mismos, donde aún se sigue practicando la trashumancia. De esta forma, cada primavera, casi 1500 familias parten hacia las alturas cordilleranas en búsqueda de las tiernas pasturas naturales producto del inicio de estación y el deshielo. 


Pero, ¿Cómo terminar nuestro recorrido sin hablar de nuestro querido amigo, el vino? Mendoza no es solo vino, pero no es casualidad que sea una de las diez capitales mundiales del vino a nivel mundial ¿O sí? Y es que el clima mendocino, árido y con gran amplitud térmica, sumando la irrigación artificial, la posicionan como una de las mejores regiones para la producción de la vid, así como de ciruelas y duraznos. Debido a ello, la región es productora del 90% de la oferta actual de vinos, dentro de la cual Mendoza concentra el 70% de la producción regional, donde el varietal “estrella” lo constituye el Malbec. 



Más allá de que les guste o no el vino, el paisaje de los viñedos sobre la cordillera de los Andes, es una maravilla que vale la pena ver. Además, la visita a las bodegas también aparece como una oportunidad de degustar gastronomía gourmet, inmersos en un paisaje de ensueños. Y no es solo eso… Durante la primavera, además, la floración de los ciruelos y los durazneros hacen que las rutas provinciales se llenen de vida y color, creando un ambiente de cuentos de hadas. 


Y aún queda mucho por contar… Los olivos, por ejemplo, tradicionales de la región y plasmados en la ruta del olivo, que incluye diferentes fincas con la posibilidad de conocer el proceso de elaboración del aceite de oliva e incluso probar diversas recetas. Y como a nosotros nos encanta lo dulce, pensamos también en los alajores, esos souvenirs que no pueden faltar al terminar un viaje ¿Sabías que Mendoza tiene al alfajor premiado dos años consecutivo como el mejor alfajor nacional? ¡Si! ¡Los alfajores Entre Dos en todas sus variedades! Y es que créanme, tienen bien merecido ese puesto y existen para el agrado de todos: de frambuesa, de dulce de leche, de ron y de wiski, con merengue y con naranja. Y vos, ¿Cuál probarías? 


Mendoza… Tierra del sol, el buen vino y ¡Muchas cosas más! Porque Mendoza nunca deja de sorprendernos, y menos con su variedad de sabores y paisajes. Sé que seguramente ahora te morís de ganas de viajar, de conocer… pero por lo pronto te dejamos la receta de las tortitas mendocinas para que viajes a través de los sabores. 


Ingredientes: (Para 8 tortitas) 

• 500g de harina 000 

• 250 ml de agua 

• 125g de grasa vacuna o manteca 

• Sal a gusto 

• 2 cdtas de levadura en polvo (opcional) 

(Siempre serán, de una cantidad x de harina, la mitad de agua y un cuarto de materia grasa. 

El agregado de levadura depende de si queremos lograr raspaditas (mas chatas y sin aire) o pinchadas (más altas y esponjosas).) 


Procedimiento: 

1. Hacemos una corona con la harina y en el centro agregar la sal y la materia grasa (También la levadura en caso de hacer pinchadas). 

2. Integrar despacio a medida que se agrega el agua tibia. Amasar hasta obtener una masa suave. 

3. Dividir la masa en 8 bolitas iguales. Dejar reposar sobre la mesada por media sobre la mesada bajo un repasador. 

4. Precalentar el horno a 180°C durante unos minutos. Dar forma a las tortitas achatándolas con la mano y dejándolas en forma redonda. En caso de ser raspadas, hacer un tajito en el centro para facilitar la cocción. Si son pinchadas, con ayuda de un tenedor hacer las pequeñas perforaciones características de las “pinchadas” 

5. Enviar al horno durante 20 minutos o hasta que doren. 

¡A disfrutar con un buen mate!


Por: Michelle Wdowiak


viernes, 2 de julio de 2021

Entre Sabores entrerrianos

Entre viajes y recetas llegamos hoy a Entre Ríos, otra provincia de la región del Litoral. Hogar del primer presidente constitucional de Argentina, Justo José de Urquiza, y de uno de los últimos bosques de palmeras Yatay del país, Entre Ríos es una provincia con mucho que ofrecer. Desde las tranquilas playas del Uruguay en el sur, hasta la alegría de los famosos carnavales de Gualeguaychú y un gran número de centros termales para visitar en familia ¿Sabías que Entre Ríos es la provincia  con mayor concentración de los mismos? A lo mejor escuchaste hablar de Federación, uno de los más grandes de todos, que convirtió el termalismo en casi un parque de atracciones, pero ¡Los hay de todos tamaños y para todos los gustos!


Pero como aquí nos gusta hablar de sabores, ¡Vamos a ello, que Entre Ríos tiene mucho que aportar en cuanto a gastronomía se trate! Entre Ríos es diversidad, donde a los platos típicos a base de pescados de río, guisos de carne de vaca, locros con cerdo y carpincho se le ha dado también la impronta de los inmigrantes. No es casualidad que la provincia sea sede de la Fiesta Nacional de la Colonización, celebrada cada año en la ciudad de San José en honor a Urquiza que, durante su gobierno, abrió las puertas del país a inmigrantes en busca de una mejor vida. Encontramos en Entre Ríos chucrut y cerdo asado de los alemanes; pescados rellenos típicos de las comunidades judías, pastas y pizzas de los italianos y la más fina pastelería francesa.

La gastronomía es parte de la identidad de los entrerríanos, y eso se ve plasmado en la gran cantidad de negocios con productos regionales que existen en sus suelos. Ellos te invitan a probar y a sentir en primera persona lo que significa vivir en esta bella provincia llena de sabores, texturas y aromas. No es poco común encontrar gran variedad de licores y productos a base de miel y es que, si bien Entre Ríos no es el principal productor de miel a nivel nacional, su miel sí que es especial.


Si alguna vez viajaste por sus rutas, habrás notado que a sus alrededores es posible observar extensas plantaciones de naranjos y mandarinas. De hecho, la producción citrícola es uno de los principales motores económicos de la provincia y, a nivel nacional es superada apenas por la provincia de Tucumán. Esto hace que la producción de miel en la provincia sea muy distinguida, y es que ¡Es a base de flores de azar! Como resultado, se trata de una miel suave y clara, con un particular aroma cítrico y un sabor con notas un tanto ácidas.

Desde tiempos históricos la miel ha formado parte de la gastronomía y de la alimentación debido a sus numerosos beneficios. Se dice que incluso en las cuevas de Altamira, España, se han encontrado pinturas rupestres de hace más de 10000 años A.C. que muestran hombres recolectando miel. También es sabido el gran uso que hacían de ella por parte de la antigua cultura egipcia, que iba desde usos con fines cosméticos a la conservación de diferentes carnes y el tratamiento de quemaduras y llagas; incluso también ¡para la elaboración de cervezas! Por su parte, en repostería existe un sinfín de recetas que la incluyen y es que la misma se constituye como un excelente endulzante natural. Además de brindar humedad, textura y un delicioso aroma a nuestras preparaciones ¡Yummy!

Seguramente te has encontrado con una gran variedad de recetas a base de miel de abeja pero, ¿Alguna vez has probado alguna que mezcle el sabor ácido de los cítricos con la dulzura de la miel? ¿No? Por eso hoy te proponemos un budín sencillo pero delicioso budín para hacer honor a los suelos entrerrianos, donde naranjos y abejas conviven en armonía ¿Qué esperas? ¡Atrévete a preparar este budinazo de miel y naranjas!

 

Ingredientes:

250g de harina leudante

2 huevos

60g de azúcar

30g de miel

60cc de aceite de girasol

60 cc de jugo de naranja

Ralladura de una naranja

1 cdta de jengibre molido

 

Para el glasé

60cc jugo de naranja

Azúcar impalpable (cantidad necesaria)

 

Preparación: 

Primero batimos el azúcar junto con los huevos hasta que espumen y se aclaren. Luego, agregamos el aceite en forma de hilo y seguimos batiendo unos minutos.

Agregamos la miel y el jugo de naranja y mezclamos hasta integrar. Posteriormente, tamizamos los secos y mezclamos sin batir demasiado. Colocamos la mezcla en una budinera a elección (yo use un molde savarín de 20cm de diámetro) y mandamos al horno precalentado a 160°C por aproximadamente 30 minutos, o hasta que al introducir un palillo el mismo salga limpio.

Una vez fuera del horno, lo dejamos enfriar para luego desmoldar. Mientras tanto, preparamos el glasé. Para ello, mezclamos el jugo de naranja con azúcar impalpable hasta lograr la consistencia deseada.

Al desmoldar el budín, bañarlo con el glasé y dejar secar. Si se desea, se puede decorar con cascaras de naranja cortadas finamente y caramelizadas ¡Voilá!

 

domingo, 27 de junio de 2021

Corrientes porá con sabor y payé!

El litoral Argentino, y no el de la vera del mar, sino la región de los ríos, está compuesto por varias provincias, entre ellas, se destaca Corrientes, la que tiene payé según reza el dicho... ¿y que será ese payé? Serán sus atardeceres en el rio, los lapachos en flor cayendo en sus calles, su hechizante chamamé sonando en las reuniones, el sabor en la mesa...? Todo hace referencia a la magia y encanto de esta región.

Queremos descubrir el payé en la mesa, y por eso recorremos sus sabores, tan parecidos a los sabores misioneros. Podemos ver la mezcla de la cultura guaranítica y española morisca, basada en alimentos como batata, mandioca, poroto, maíz, calabaza, carne vacuna, leche, queso, guayabas y mamón, entre otros elementos que abundan en las recetas.

Entre sus atractivos de rutas gastronómicas, podemos mencionar "La ruta de la yerba mate" en la zona norte de la provincia, región productora de yerba mate, donde se puede aprender acerca del proceso de elaboración de esta infusión tan preciada. Entre los imperdibles, podés visitar el establecimiento "Las Marias" en Virasoro.

Si hay algo que no falta en Corrientes es el mate y un buen chamamé. Entre las recetas más típicas de la provincia tenemos la chipa, el mbeyú y la torta frita, compañeras de tantos mates. 


La mesa correntina se luce en las reuniones de campo con chicharrón trenzado y queso de chancho. Pero si me permiten, yo tengo recuerdos de asados correntinos que se sirven de otra forma, a la estaca y recién carneado, celebrando alguna fiesta patronal, con demostraciones de doma y muchas naranjas al sol. Tengo el sabor del mbaipy que cocinaban mis abuelos y el infaltable locro del 1ero de Mayo que comenzaba a prepararse desde tempranito.


Si vamos por lo dulce, volvemos a esos sabores litoraleños de mamones, zapallos en dulces acompañados de queso fresco.

No hay que olvidarse que la pesca caracteriza a esta provincia, es por ello que los platos con surubí y dorado son los más buscados en los establecimientos gastronómicos.

Para este paseo por Corrientes vamos a preparar una receta de mbeyú, Esta receta va dedicada a Lara del sur, que anda cerca de los pingüinos y quiso preparar la receta una vez, pero no supe explicarle cómo hacerla, bueno... ya aprendí!!!

El mbeyú en idioma guaraní significa "torta aplastada", y al igual que la chipa es una comida que surge por la mezcla de culturas, ya que los guaraníes incorporaron a su recetas nuevos insumos como la leche, el huevo y la manteca con la llegada de los europeos al continente. 

Es un plato típico de la cocina paraguaya y riquísimo! Hay muuuuuchas recetas, en algunas se usan huevos, en otras no, en algunas se utiliza manteca en otras no... Hoy les dejo una receta que utilicé yo, y me quedó muy bien!


Ingredientes:

500 gs fécula de mandioca
200 gs queso (preferentemente 2 tipos de queso, cremoso y pategrás o el que tengas)
100 gs manteca pomada
c/n leche
sal a gusto

 

Preparación:

Mezclamos la fécula de mandioca en un recipiente hondo con la sal, hacemos un huequito en el medio y colocamos el queso (picado fino o rallado) mezclamos bien. Incorporamos la manteca a la preparación y mezclamos con las manos, echamos un poquito de leche, hasta lograr una masa estilo arenado que no quede muy seca.

Colocamos una sartén a fuego medio sobre la cocina previamente enmantecada o con un chorrito de aceite y colocamos un poco de la mezcla, aplastándola con una cuchara hasta lograr un espesor de medio cm aproximadamente (hay quienes lo hacen con más espesor y además las rellenan de jamón o más queso), la dejamos cocinar unos 3 minutos y luego la damos vuelta ayudados por un plato o una espátula, se termina de cocinar del otro lado, y se sirve caliente preferiblemente acompañado de un mate cocido, experiencia completa!!!

Contános si preparas la receta cómo te queda, y además qué le agregarías si hicieras mbeyú relleno!?

 


domingo, 13 de junio de 2021

Del fernet, de la birra, madrugadas sin par... Córdoba y su no se qué!

 

♪♫ De la ciudad de las mujeres más lindas
Del fernet, de la birra, madrugadas sin par
Soy cordobés…
♫♪

¡Si! Llegamos a Córdoba, una de las provincias más alegres de nuestro hermoso país. Y es que Córdoba es sinónimo de buenas vibras, música y, ¿por qué no? ¡Un buen comer! En este sentido tenemos que reconocer que nuestros amigos los cordobeses saben cómo ingeniárselas: no tienen ni a las Cataratas del Iguazú, ni al Aconcagua… ni un glaciar como el Perito Moreno. Pero eso sí, son los reyes en cuanto a rutas gastronómicas se trata. No hace falta más que entrar al sitio oficial de la provincia para descubrir la gran variedad gastronómica que la provincia ofrece al turismo: La ruta de los chacinados y quesos, la ruta del olivo, la ruta del cabrito y frutihorticultura y… ¡Hasta su propia ruta del vino!

Y es que ser cordobés es cuestión de actitud, de saber ver la belleza en las cosas más simples, las recetas de la abuela, las reuniones con amigos, la música y el baile ¡la buena onda!

Y hoy, como no podíamos dejar de hacerlo, vamos a contarles del fernet ¡Si, el fernet! Por más cliché que parezca no hay que negar que esta interesante bebida está más que ligada a la identidad de los cordobeses… si no es que a la de todos nosotros los argentinos. ¿Cómo podría ser de otra manera si más del 70% de la producción mundial de fernet se consume solo en Argentina? Y es que acá lo tomamos de una forma particular: el famoso fernet con coca.

Entonces, ¿de dónde viene esta bebida? Vamos a ver, querido lector… si has estado prestando atención a los anteriores posts publicados, no te sorprenderá saber que el fernet no es un invento argentino, sino que viene desde afuera ¡Si! Otra vez nos remontamos a costumbres traídas por inmigrantes.

Existen muchos debates en torno al país de origen del fernet, aunque la mayoría de las versiones coinciden en que el mismo surgió en Italia hacia comienzos del siglo XIX. Se dice que la misma surgió de la mano del farmacéutico Bernandino Branca y su colaborador sueco, un botánico apellidado Fernet. Ahora estarás pensando “¡Pero que extrañas profesiones para tratarse de una bebida alcohólica!” Y es que… ¡El fernet tuvo su origen en una bebida digestiva hecha a base de hierbas!

Ahora bien, lo interesante aquí es que a la mayoría de los italianos ¡No les gusta el fernet! ¿Ah, no? No, si bien la misma se vende hoy con fines no necesariamente medicinales, se la considera como una bebida amarga y sin sabor.  Incluso a muchos de ellos les parece asombrosa la pasión de los argentinos por este licor italiano que asocian a sus abuelos.

Bueno, seamos honestos: la primera vez que lo probamos puede resultar un tanto feo al gusto hasta que nos acostumbramos. Tal vez los argentinos somos un poco masoquistas, o somos tan dulces que necesitamos de los sabores amargos (como el mate o el fernet) para equilibrarnos ¿Quién sabe?

La verdad es que la combinación de esta bebida con Coca Cola es la que hizo que la misma se consolide en el país, además de posicionarnos también como uno de los principales países consumidores de esta gaseosa. Cuentan que los primeros en realizar esta novedosa mezcla fueron los cordobeses, justamente, hacia finales de la década de los 80’s. Córdoba fue destino de muchos inmigrantes italianos que llevaron consigo el fernet como medicamento digestivo y que, quizás, nunca hubiesen imaginado la repercusión que tendría esta bebida en el nuevo país al que denominarían hogar.

Pero, ¿y la receta? ¿Qué comemos hoy? ¡No se preocupen, ya vamos con eso! Hoy nuestro protagonista es el fernet y como tal, vamos a compartirles una receta un poquito diferente: un tiramisú de fernet. El tiramisú, con su característico sabor a café, es un postre clásico de los italianos también, pero cuya historia se la contaremos en otro momento. Hoy, en cambio, vamos a ponerle a este postre la impronta cordobesa ¿te animás?

 


Ingredientes:

6 yemas

70 cc de fernet

150g de azúcar

300g de Crema de leche

300g de queso crema

5 g de gelatina sin sabor

2 paquetes de vainillas (galletitas)

C/n  de cacao en polvo

 

Para el almíbar de fernet

50cc de fenet

50cc de agua

100g de azúcar

 

Preparación

Comenzaremos preparando el almíbar, llevando a hervor el azúcar, el agua y el fernet por aproximadamente tres minutos. Reservamos.

Luego, en un bowl a baño maría, batimos las yemas el azúcar y el fernet hasta que se forme una espuma clara. Una vez logrado esto, sacamos la preparación del fuego y continuamos batiendo hasta que enfríe.

Por otro lado, hidratamos la gelatina con agua fría (en partes iguales) y la activamos con calor a baño maría y reservamos.

Luego, vamos a batir la crema a medio punto (que no nos quede como para un Chantilly) y agregamos junto con el queso a la mezcla de huevos y fernet. Removemos hasta integrar.

Una vez hecho esto, procedemos a mojar las vainillas en el almíbar de fernet y cubrimos con ella el fondo de un recipiente a elección (puede ser redondo, cuadrado, desmontable o el que usas siempre para la chocotorta). Luego, esparcimos sobre las mismas la mitad de la crema de fernet, seguida de otra capa de galletitas y la mitad restante de la crema. Dejamos en la heladera un mínimo de seis horas. Antes de serervir decoramos con cacao amargo a gusto.

jueves, 3 de junio de 2021

Caminos de Sabores en Chubut, el corazón de la Patagonia

Nuestro recorrido hoy nos lleva a los amaneceres más brillantes y los atardecer más bellos con colores mandarinas y un viento patagónico que no sólo te despeina, se lleva todas tus preocupaciones... y les digo, algo trae la marea, esa marea extraordinaria! 


Hoy vamos a Chubut, el corazón de la Patagonia, donde los paisajes van de la montaña y los lagos de cuentos, pasando por la estepa patagónica donde el horizonte se hace eterno y la región del litoral con su mar argentino, la llegada de las ballenas, y toda la fauna marina.

Pero como nosotros vamos por la comida a todos lados, o al menos es nuestro principal objetivo, estoy feliz de anunciar que llego a la meca de mis aspiraciones culinarias... porque Chubut es soñado en la cocina. Investigando un poquito acerca de qué más había a parte de lo que ya conocía, encontré tanto que me dieron ganas de volver y hacer el recorrido gastronómico de la provincia a conciencia. 


Para quien le interese profundizar en el tema hay una Guía Gastronómica "Rutas Gastronómicas de Chubut. El Corazón de la Patagonia" del año 2013, la primera guía gastronómica de la Patagonia, donde la invitación tiene nombre de Caminos, como Camino de Puerto Madryn y Península Valdés, de los galeses, del mar a la cordillera, de los alerces y pueblos que honran sus ríos, de la comarca andina, al sur la ruta 40, marino la ruta azul; una invitación que si no te convence con estos nombres, nada lo hará.

Volviendo a lo nuestro, la particularidad de esta provincia es la amplitud en cuanto a regiones ambientales que por supuesto dan diferentes maneras de aprovechar los ingredientes que da la naturaleza, podemos obtener cerca del mar en lugares como Puerto Madryn o Puerto Pirámide de lo mejor de la pesca de Argentina, donde los platos están caracterizados por mariscos y pescados.

Alejándonos un poquito de la costa podemos encontrar numerosas Casas de Té, donde la clara inmigración galesa hace acto de presencia, y es que Chubut tiene un pasado galés con la llegada del Mimosa en 1865 y la utópica Gales fuera de Gales se dio por fin en esta provincia, donde pudieron asentarse y conservar sus costumbres traídas de más allá del mar. En estas tierras nace la torta galesa, una combinación gastronómica resultado de las tradiciones galesas y las condiciones climáticas de la zona, con alrededor de 20 ingredientes. La torta que no envejece es la estrella de las Casas de Té galesas, las principales se encuentran en Gaiman, Trevelin, Esquel y en el Pueblo de Luis.


Si seguimos hasta la zona cordillerana, nos adentramos a la región de lagos y montañas, paisajes sacados de cuentos donde las frutas patagónicas son las estrellas, una tarta de frambuesas, cerezas deliciosas, arándanos y frutillas, ciruelas y duraznos, sólo de pensar en tantas frutas me dan ganas de ponerme a cocinar algo rico! 


Pero no todo son postres, podemos encontrar en las mesas corderos, chivos y animales de caza también, las comidas son suculentas, ya que el clima es frio y hay que consumir calorías! También encontramos pesca como trucha, salmón y ricos quesos de vaca u oveja. Productos ahumados, bodegas y cervezas artesanales, la verdad que hay para todos todos los gustos, sin excusas, Chubut tiene encanto en la mesa, y nosotros quisiéramos poder dar un recorrido ya y degustar estos placeres.

Como nos inspiramos con tanta riqueza gastronómica, estamos dudando de qué receta hablar hoy, pero como no podemos dejar pasar la oportunidad, traemos el emblema de las Casas de Té, una receta de la torta que no envejece, la torta galesa.

Te contamos un poquito más acerca de este plato tan famoso, cuando los galeses se establecieron hace muchos años en la zona de Chubut, debieron sobrevivir con muchas dificultades, la falta de agua dulce y la escasez de alimentos. Se cuenta que mientras los hombres buscaban mejores asentamientos, las mujeres trataban de hacer rendir los alimentos y sobre dodo durar en el tiempo, además tenían intercambios de productos con los pueblos nativos de la región que eran los tehuelches.

Así fue como nace la torta galesa, mezclando ingredientes que tenían, como harina, azúcar negra, nueces y frutas azucaradas, miel y especias; dando como resultado una rica torta con propiedades tan importantes como calorías necesarias y durabilidad. 

                                          

Con los años cada familia tiene su receta, y también se añade una tradición... cuando se casan los novios en Chubut se prepara una torta de bodas con la base de una torta negra, que no se consume en la fiesta, si no que se la guarda y la van comiendo durante 1 año los novios, cada mes de aniversario, como símbolo de superación de dificultades. 

Ingredientes:

  • 350 gs. harina
  • 2 cdtas polvo de hornear
  • 1 cdta de bicarbonato de sodio
  • 200 gs azucar negra
  • 2 cdas cacao en polvo
  • 200 gs manteca
  • 4 huevos
  • 100 gs pasas de uvas rubias
  • 100 gs pasas de uvas negras
  • 100 gs ciruelas pasas
  • 100 gs cerezas (frescas mejores, si no las que consigas)
  • 100 gs nueces 
  • 100 gs almendras
  • 1/2 vaso de coñac, ron, whisky (lo que tengas)
  • 1 cdita jengibre molido
  • 1/2 cdta. nuez moscada
  • 1 cdta. canela
  • 1 naranja rallada
  • 4 cucharadas de miel

Preparación:

Comenzamos un día antes dejando en remojo las pasas con la bebida que tengas. Precalentamos el horno bajo 160°. Batimos la manteca con el azúcar en un bowl hasta cremar, vamos incorporando los huevos de a 1 y seguimos batiendo, incorporamos la miel. Escurrimos las frutas y las agregamos a la mezcla. 

A parte mezclamos los ingredientes secos, harina, cacao, polvo de hornear y especias, también agregamos las nueces picadas y las almendras. Agregamos de a poco la mezcla de secos al bowl de huevos y manteca hasta conseguir una masa bien integrada.

Enmantecar un molde, colocamos la mezcla en el molde y lo llevamos al horno 180° durante 1 hora aproximadamente. Probamos con un palillo si al pinchar sale seco estaría listo. Para evitar que salga seco es recomendable colocar una fuente con agua bajo el molde al cocinarse en el horno.

Ya te contamos de Chubut y su rica gastronomía, ahora te invitamos a que prepares esta riquísima receta y nos cuentes qué te pareció!

La contraseña para el juego del instagram es: sabores de viaje en chubut

                                            

sábado, 22 de mayo de 2021

Lágrimas dulces del Litoral. El mamón y el Chaco

Próxima parada… ¡Provincia del Chaco! Chaco, que como Misiones forma parte de la región del Litoral. Lo que me trajo un recuerdo del verano anterior, cuando decorábamos postres con Carito “¡Que lindo sería ser de la Patagonia, tierra de las cerezas y las frambuesas!”, decía ella, a lo que yo respondí entre risas “pero sos del litoral, tierra de los mamones y de los mangos…”  y, ¡que frutas eh!

Esta pequeña anécdota me llevó pensar que a veces no nos damos cuenta del valor de lo que tenemos. Apuesto a que, si cualquiera de ustedes va y le pregunta a su abuela o a su mamá sobre las cualidades del mamón, les van a salir con una lista interminable. Y es que antes era normal en las madres conocer las propiedades curativas de las cosas que nos brinda la naturaleza, entre muchas cosas que sabían y se pasaban de generación en generación. Y déjenme decirles que el mamón cuenta con muchas de ellas ¡Que no pase desapercibido!


Como a nosotros nos gustan las historias, antes de comenzar permítanme contarles la historia del mamón, la de las lágrimas doradas. Entre los pueblos originarios de la región existen varias versiones sobre el origen de esta fruta rica en nutrientes, pero todas coinciden en algo: es producto de una historia de amor que no pudo ser. Y, como en toda historia de amor bien contada, la misma se encuentra protagonizada por dos hermosos jóvenes… que eran de mundos diferentes ¿Será que tenemos nuestra propia historia de Capuletos y Montescos?

Se dice que hace mucho tiempo, en la época en que los colonizadores llegaban a América, había nacido una hermosa joven, hija del cacique de una conocida tribu. Dicen que la joven era muy admirada y querida por todos y que por su singular belleza era codiciada por muchos muchachos de la tribu. Sin embargo, la joven estaba perdidamente enamorada de, nada más y nada menos, un español. Aquí es donde existen diferentes versiones: algunas dicen que el cacique y padre de la princesa dio su bendición a la joven pareja de enamorados al ver la felicidad de su hija y que los mismos se casaron. Otras dicen que, ante el desacuerdo de su tribu, la niña se veía a escondidas con el extranjero de piel pálida, cultivando así un apasionado romance.

Sin embargo, no debemos olvidar que la belleza singular de nuestra protagonista tenía a muchos cautivos. De este modo, cuentan las leyendas que un día, un enamorado de la joven la siguió y en un ataque de celos disparó una flecha mortal al corazón del español. Se cuenta que se lo mandó a enterrar en el mismo lugar de su muerte y que la tristeza de la joven fue tanta que murió junto a su amado. Tiempo después, en ese mismo lugar, nació una planta con frutos en forma de lágrimas, la cual se dice que es la princesa llorando por su amor perdido.

Hoy, conocemos a esa fruta como mamón, o papaya en algunos países de centro américa. Se trata de una fruta con bajo contenido calórico, pero que, sin embargo, posee grandes concentraciones de vitamina A y C. También es una fruta rica en minerales: contiene potasio, calcio, magnesio y fosforo. Pero… ¿Pera qué utilidades tiene? (además de alegrarnos a los golosos con sus diferentes versiones). Las enzimas con las que cuenta hacen que sea una buena opción para neutralizar la acidez del estómago, por lo que si sufrís de gastritis ¡No dudes en incluirlo en tu desayuno! También se dice que ayuda a mejorar la indigestión y que el látex presente en su pulpa y semillas sirve para combatir los parásitos.


¿Cómo se consume? Como con casi toda fruta, la mejor forma de consumirla para conservar sus propiedades es de forma natural. Sin embargo, se trata de una fruta muy popular para la elaboración de postres, mermeladas, batidos o helados. Hoy en Sabores de Viaje, les dejamos unas alternativas muy deliciosas y fáciles de preparar: mamón en almíbar y mermelada… y, ¿por qué no? Un postre típico chaqueño, ¡Alfajores de mamón!

Si, lo sé, muy posiblemente a estos últimos no les tienen estima pero, ¡anímense a probarlos y de paso conocer una tradición más de nuestro país! Si soy honesta, en casa nadie les tenía fe pero, para sorpresa de todos, ¡Fueron un completo éxito!

 

Mermelada de Mamón:

Ingredientes:

1kg de mamón mamón maduro

500g de azúcar

1 cdta de vainilla

Jugo de media naranja 


Preparación

1)      Lo primero que vamos a hacer es lavar bien el mamón y pelarlo. Luego lo cortamos en cubitos y lo ponemos dentro de una olla. Incorporamos el azúcar y lo dejamos reposar por una noche.

2)      A la preparación, que ahora estará jugosa, agregamos la vainilla y el jugo de naranja. Ponemos a hervir hasta que se deshagan todos los trocitos de fruta, removiendo de vez en cuando (en mi caso fue una hora). En caso de creer necesitar más líquido, siempre se debe agregar la misma cantidad de azúcar que de agua.

*Nota: En el caso del mamón en almíbar, el procedimiento es exactamente el mismo, con menor tiempo de cocción, aunque se recomienda que la fruta no este completamente madura para que no se desarme al hervir. Una vez que los trozos de mamón (cortados del tamaño deseado) están blandos y cubiertos de almíbar, ya se puede retirar del fuego.



Alfajor de Mamón

Ingredientes (12 alfajores grandes)

-         Para la masa:

100g de azúcar blanca

100g de azúcar moreno

75g de grasa o manteca

2 huevos

2 yemas

La cascara de una naranja

300g de harina leudante

100g de almidón de mandioca

2 cdtas de bicarbonato


-         Para el relleno

500g de mermelada de mamón

-          Para la cobertura

2 claras

150g de azúcar blanca

100g de azúcar impalpable

 


Procedimiento:

1)      Derretimos la manteca o la grasa junto con la cascara de naranja. Luego la dividimos en dos bowls: uno con azúcar negro y otra con blanca. Batimos bien ambas preparaciones

2)      Luego, agregar un huevo y una yema a cada una de las preparaciones y mezclar.

3)      Tamizar los secos e incorporar la mitad a cada una de las mezclas. Incorporar con la ayuda de una espátula.

4)      Lo envolvemos en papel fil y llevamos a la heladera por media hora. Luego, mezclamos ambas masas buscando un efecto marmolado. ¡No amases mucho que se unen completamente!

5)      Extendemos la masa en una mesada enharinada hasta obtener un grosor de aproximadamente 4mm. Cortamos con un cortante en forma de circulo o un vaso y lo enviamos a un horno precalentado a 180° por aproximadamente 10 minutos o hasta que se doren.

6)      Una vez sacados del horno, los dejamos enfriar para posteriormente rellenarlos con una generosa capa de mermelada de mamón.

7)      Para preparar la cobertura, calentar las claras con el azúcar común a baño maría. Las batimos obteniendo un merengue suizo, al que agregamos el azúcar impalpable y un poquito de agua para dejarlo mas manejable. Sumergimos los alfajores en la preparación y los dejamos secar ¡Yummy!



miércoles, 12 de mayo de 2021

Paisajes de Catamarca con Sabor a Membrillo y algo más

En nuestro recorrido por Argentina nos vamos hoy a Catamarca. Quizás puedas pensar, pero ¿qué hay en Catamarca? Y es verdad que se conoce poco de esta provincia, que, si bien tiene características similares a otras provincias del NOA, lo que buscamos es resaltar las diferencias, eso que las distingue y caracteriza por sobre las otras, sobre todo en la mesa.

Cuando era más chica, mi mejor amiga hizo un viaje a Catamarca con su papá y me acuerdo que trajo de regalo 2 tipos de membrillos; uno en frasco con unos gajos de membrillo riquísimos y un dulce de membrillo de esos que compras para comer con queso. Pero este era clarito, no rojo como usualmente vemos el membrillo y tenía una capita de azúcar que lo hacía parecer confitado. Déjenme decirles que desde ese día yo asocio a Catamarca con el membrillo, sin saber y sin conocer nada del lugar en ese entonces. 




Efectivamente Catamarca celebra esta fruta tan rica en el Festival del Dulce de Membrillo, en un lugar llamado Las Juntas, donde se lleva produciendo este dulce singular desde hace muchísimos años.

Por si no conocen el membrillo, es una fruta que suele confundirse con las manzanas, y es que son muy parecidas, incluso son parecidas a las peras. Su particularidad es que se consume después de cocinarla.  Así como lo lees, no se la come cruda ya que tiene un sabor ácido y áspero. En un principio se consumían principalmente asados con miel y una buena capa de harina, luego se incorpora el azúcar a las preparaciones y llegamos a lo más parecido a la forma en que la consumimos ahora.

Es una fruta típica de otoño e invierno, y se la utiliza para preparaciones como mermeladas, confituras y dulces. Ideal para la dieta de niños, jóvenes y deportistas ya que posee muchos nutrientes. Incorpórala a tus comidas, ¡no te vas a arrepentir!

La planta de membrillo se desarrolla muy bien en esta provincia por las condiciones de suelo y clima. Cabe destacar que el membrillo que se elabora en Las Juntas es uno de los mejores de la región, totalmente artesanal, de un sabor inigualable y de alto prestigio. Además, se realiza un concurso de "Membrillos del Cerro" para poner en valor el trabajo de los artesanos, mejorar la calidad del mismo y poder transmitir esta tradición a otras generaciones. ¡Qué lindo saber que esta fruta forma parte de la identidad del lugar!

Pero Catamarca es algo más que membrillo. Como en la canción Paisajes de Catamarca "Desde la cuesta del Portezuelo, mirando abajo parece un sueño..." Los Chalchaleros hicieron un poema de esa vista de la cuesta, y es que en verdad mirar los caminitos que se pierden allá abajo es soñado. Lo que también es un sueño son los sabores que podés encontrar antes de subir la cuesta: en los puestos artesanales hay dulces típicos de la zona como nueces confitadas, tortillas asadas y los rosquetes de anís glaseados, por lo que son una parada obligada para abastecerse antes de llegar a la cima de la cuesta y disfrutar esa vista. 


Y como queremos revivir sabores, hoy vamos a preparar uno de los platos típicos que solemos hacer con membrillo, y es que somos fans también de la Pastafrola, compañera de tantos mates en Argentina y la tarta preferida de mi papá. ¿Pero qué sabes de la pastafrola? Además de la pregunta de la discordia: ¡¿membrillo o batata?!


Hay una leyenda que cuenta que su origen se debe a una sirena llamada Parténope, quien visitaba el Golfo de Posillipo en Italia... Sí, así es, como la pizza, los antecedentes de la pastafrola son tanos. Los napolitanos hacían regalos a la sirena, ingredientes que 7 vírgenes le acercaban como trigo, requesón, huevo, agua de azahar, y ella agradecida elaboraba una tarta con estos ingredientes, ¿qué me dicen? ¡¡¡La tarta la creó una sirena!!! 

Pero en otra versión, un tanto más creíble, fueron las religiosas del Convento San Gegorio de Armeno en Nápoles quienes la prepararon llamándola "pastiera napoletana" y se la rellenaba con una crema que se preparaba con ricota. Se hizo tan famosa que llegó a la corte de los Borbones y se convirtió en uno de los dulces preferidos de Italia. A nuestro país llega de la mano de los inmigrantes, y como toda buena receta es adaptada con los ingredientes del lugar. Así surge que aquí la preparen con relleno de membrillo o su eterna archienemiga la batata, también bien argentina con dulce de leche, siendo la elegida para acompañar un buen mate.

¡Hoy queremos rendir homenaje al membrillo y a esta exquisita pastiera, así que te dejamos dos recetas! Siiii, dos recetas, la de pastafrola y una pastiera de ricota. No será como la de las religiosas o tan mágica como la de la sirena, ¡pero es una adaptación que es para chuparse los dedos!


Pastafrola de membrillo

Ingredientes:

  • 100 gs. manteca pomada
  • 100 gs. azúcar
  • 1 huevo
  • ralladura de 1 naranja
  • 250 gs harina 0000
  • 1 cucharadita de polvo de hornear
  • 400 gs membrillo

Preparación:

Blanqueamos la manteca y el azúcar con batidora, agregamos el huevo y la ralladura de naranja y seguimos batiendo un poco más hasta integrar. Incorporamos de a poco la harina mezclada con el polvo de hornear y mezclamos con espátula hasta formar una masa  homogenea, armamos un bollo y cubrimos con film. Esta masa se lleva a heladera por 30 minutos aproximadamente. 

Estiramos la masa con palote hasta tener un espesor de 5 mm, colocamos sobre tartera desmontable, puede ser redonda de 24/26 cm o rectangular de 20x30 cm. Mezclamos el membrillo con un poquito de agua caliente hasta lograr que el membrillo pueda esparcirse sobre la masa. Cortamos unas tiritas con la masa que sobra y llevamos a horno precalentado 180° por 40 minutos aproximadamente y... ¡listo! Preparamos el mate mientras se enfría para desmoldar.



Pastiera a la moda de la casa

Ingredientes:

  • 200 gs. manteca
  • 150 gs. azúcar
  • 2 huevos
  • Ralladura de 1 naranja
  • 400 gs harina leudante
  • 1 cucharadita de polvo de hornear
  • 400 gs. ricota
  • 100 gs. azúcar
  • 2 huevos
  • Ralladura de naranja (opcional)
  • 100 gs. queso crema o crema de leche

Preparación: 

Al igual que con la pastafrola se repite el proceso de preparación de la masa. Se divide el bollo de masa en 2 partes, la primer parte con 2/3 de masa para el fondo de la tartera (lo ideal es que sea desmontable), reservamos el resto de la masa para tapar la preparación. Para el relleno, vamos a mezclar la ricota con los huevos, el azúcar y la crema, esta mezcla se esparce sobre la masa. Luego cerramos la tarta con la masa reservada, pinchamos un poquito con tenedor y llevamos a horno precalentado a 180° por 50 minutos aproximadamente. Par decorar podes bañarla con una lluvia de azúcar impalpable y... ¡terminada! ¡Ni la sirena la preparó tan rápido! Sólo nos queda disfrutarla.